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España campeón de una Copa Davis un tanto gris

Foto del escritor: Iván AguilarIván Aguilar


Este domingo se llevó a cabo la primera final de Copa Davis en su nuevo formato, donde la favorita y local España se llevó la ensaladera de plata al vencer 2-0 en la serie a Canadá. Pero, ¿cuál fue el balance de este nuevo formato?.


La Copa Davis representaba lo más tradicional del tenis, contando con un formato que empezaba a perder atractivo y espectáculo, es por ello que se optó por buscar un nuevo formato que atrajera mayor expectación en el público; ante esto Grupo Kosmos presidido por el central del Barcelona, Gerard Piqué, presentó un nuevo formato que contradecía a esta tradición y que no era del agrado de todo.


Ante los constantes ataques de los más puritanos del tenis, la semana anterior arrancó el nuevo formato donde las 18 selecciones se hicieron presentes en Madrid para buscar la ensaladera de plata. En una semana de mucho, mucho tenis se jugó la fase de grupos, donde las naciones más destacadas fueron España, Rusia, Serbia, Canadá, Australia, Alemania, Gran Bretaña y Argentina, las cuales chocaron en cuartos de final, dejando los cruces de Rusia vs Canadá y Gran Bretaña vs España en semifinales.


Este domingo se jugó la final donde Canadá llegó a su primera final de Copa Davis ante España, pero al final del día los ibéricos se llevaron la copa tras ganar 2-0 la serie con las victorias de Roberto Bautista Agut por 7-6 6-3 ante Felix Aliassime y de Rafael Nadal por 6-3 7-6 ante Denis Shapovalov, consiguiendo el sexto título mundial para España.


Si bien todo fue júbilo y algarabía para los españoles, ¿qué balance dejo este nuevo formato y qué tanto benefició a otras selecciones?.


A título personal diría que este nuevo formato dejo un sabor agridulce en el paladar de los fanáticos al tenis, ya que presentó un formato un tanto “más rápido” pero dejó de lado la esencia de la Copa Davis, como ya se tenía pronosticado. Pero aún así dejó una serie de problema que a continuación se en listan.


1.- Falta de esencia:

La Copa Davis siempre se ha caracterizado por presentar un ambiente diferente a un partido de tenis del circuito ATP, pues la fiesta que se vive en la tribuna es única y es un plus que le da a las naciones locales, contar con el apoyo de su gente. En este nuevo formato esto fue un gran ausente, ya que muy poca gente se hizo presente en las gradas; con excepción de las series de Argentina y Canadá que eran las más ruidosas y numerosos, pero aún así no alcanzaban el número deseado.


2.- Dobles inservible:

En el antiguo formato el punto de dobles era parte crucial en las eliminatorias, ya que sentenciaba una serie o le daba esperanza a quien fuera abajo en el marcador. En esta ocasión el dobles pasa completamente desapercibido, ya que sí una serie estaba sentenciada en 2-0 es prácticamente inútil jugarlo, al no representar nada. Por lo que en fase de grupos no ayudó a sentenciar prácticamente ninguna eliminatoria y en rondas finales sí lo hizo, pero por ejemplo en la final no se hizo presente.


3.- Poca competitividad:

La competencia en la fase grupos fue nula, terminando muchas series en 3-0 y no hubo la tensión a la que nos acostumbró la Copa Davis. Poca emoción dentro y fuera de las canchas.


4.- Tiempos incómodos:

El nuevo formato es más rápido, pero por ende también obliga a jugar seis series en un día, por la mañana y por la tarde. Ante esto obliga a que las series de la tarde se lleguen a retrasar y terminen a altas horas de la noche, como fue el caso de la serie entre Estados Unidos e Italia donde el último juego termino a las 4am hora local.

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