Este domingo se jugó uno de los partidos más esperados de la Premier League, donde Manchester United recibió al líder Liverpool donde al final ambos no se hicieron daño y con el 1-1 en el marcador, el encuentro no estuvo exento de polémica y grandes atracciones.
Con un momento completamente diferente, Liverpool en la cima de la tabla y los “red devils” en el lugar número 14; la víctima parecían ser los locales. Sumado a esta estaba la baja de Paul Pogba, Antonhy Martial y Jesse Lingard. Mientras que los campeones de Europa presentaban la baja de uno de sus jugadores estelares, Mohamed Salas, pero sumaban el regreso de Alison Becker a la puerta.
Tras los primero 10 minutos de juego bastante cerrado y con mucho movimiento en el medio campo, los dirigidos por Jürgen Klopp se fueron afianzando en el terreno de juego, creando varías oportunidades de peligro. No fue hasta el minuto 35, cuando la polémica se hizo presente, cuando tras un remate de Rashford los locales tomaron la ventaja, 1-0, y la jugada se llevo a revisión al VAR el gol fue validado; pese haber cometido una falta al inicio de la jugada.
Al minuto 43 parecía que Liverpool encontraba igualar el marcador, cuando Sandro Mané anotaba el 1-1, pero tras la revisión en el VAR, el arbitro decidió anular el gol por una mano al momento en que Mané controlada el balón.
El segundo tiempo estuvo más apretada, con gran parte del tiempo jugando en el medio del campo y con acciones de gol para ambos equipos. Pero finalmente el Liverpool encontró paridad en el marcador al 84’, tras un centro razón de Andrew Robertson, el recién ingresado Adam Lallana, llegó a segundo poste para empujar el balón al fondo de la portería y sentenciar el empate.
Liverpool sigue al frente de la tabla de posiciones y sumo a 25 puntos, escoltado por el City con 19 puntos, quien venció al Crystal Palace por 2-0. A su vez, el United sumó 10 puntos y escaló una posición para colocarse en 14, por encima del Everton.