Anthony Joshua despertó a Andy Ruiz del sueño de ser campeón mundial de los Completos y recuperó el sábado en Arabia Saudita los cinturones OMB, AMB y FIB que perdió en junio en Nueva York.
La contienda distó mucho de ser explosiva como la primera y mostró a un peleador británico más precavido, boxeando a distancia y a un mexicano pasivo, sin ideas, pesado y hasta carente de condición física, lo que le hizo perder de manera unánime.
En el primer episodio ambos salieron precavidos, sin embargo, fue Joshua quien asestó un potente derecha o que le abrió la ceja a Ruiz Jr.
Para el segundo round, el británico se movía por el cuadrilátero y mantenía a distancia al mexicano, quien logró meterse en a la guardia y con un izquierdazo logró lacerar el rostro de su rival.
La pelea entró en una pasividad, hasta que al final del cuarto asalto, Andy logró acortar distancia y metió un potente derechazo que conmovió a Anthony.
La batalla round a round se hacía añeja y Joshua dominaba imponiendo su distancia ante la falta de explosividad de Ruiz.
Fue el séptimo episodio donde ambos se lograron conectar con mayor potencia, pero fue el británico quien salió con la mejor parte, pues con sus derechazos hacía más grande la herida en la ceja del mexicano.
En el octavo Andy tuvo el mejor de sus episodios en toda la pelea, pues su ataque fue constante y logró impactar en varias ocasiones a Anthony.
Joshua siguió trabajando la pelea, conectando jabs y moviéndose por todo el cuadrilátero para no ser blanco fijo para Ruiz, quien no lograba cerrarle los caminos y para el décimo round ya lucía cansado.
El final del combate le trajo el mejor golpe de poder a AJ, quien se la reventó a la parte de la izquierda de la cara al Destroyer, quien desesperado le pedía al británico se parara a intercambiar golpes, algo que simplemente no iba a pasar.
Al final dos jueces calificaron 118-110 y el tercero 119-110, para concretar la victoria de Anthony Joshua.
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